miércoles, 9 de junio de 2010

Si no sientes que el mar puede servirte de seudónimo,

es que no has experimentado nunca ni un instante de soledad.

(Emil Cioran)

I

Si por acumulación de impotencia cargara contra el mar armado solamente de puños, y golpeara, y terminara por desangrarme de los golpes, antes de eso, intentaría agarrar cada gota que saltara de cada chapuzón y arrojarla contra mis ojos para que vieran por qué lo hago.

II

Si me dijeran por qué sitios pasó el agua que hoy llueve, cada gota parecería más grande, como más llamando a pedirle un abrazo, aunque pudiera ahogar.

III

Empezar a nadar en línea recta, condenarse a la misma dirección, y, de repente, parir una curva, dar a luz a una curvatura uniforme que se cierre en una cruz. Geometría metafísica flotante.

IV

En el cántaro que formo con el gesto de mis manos pongo mi cuerpo como ofrenda. Duermo entre mis anillos, acurrucado en mí, todavía no tomado.

1 comentarios:

Mateo dijo...

palabras que suenan a agua. a mucha agua.
(y me hizo reir lo de geometria metafisica flotante.)

 

Copyright 2010 Con la yema de la lengua.

Theme by WordpressCenter.com.
Blogger Template by Beta Templates.