1.
Tu pelo a la tarde. Entre las nueve y las diez tu voz para hacer un bordado de tul sobre la tela de la angustia. Un descanso, como quien toma distancia para saltar entre dos techos altísimos. Tu cuello durante mi lengua.
2.
Voy como postre, como adorno inútil, regalo dulce para engañar el resto del hambre, fin de la sed.
3.
Aprendimos: la desesperanza mira desde atrás del espejo en un vidrio oscuro, custodia nuestro testimonio. Al ofrendarnos su tiempo nos da valor, nos pone un precio demasiado alto.
4.
Ya sobrevivimos a la caída. Fuimos la lluvia de los hijos de Dios.
Durmamos. El fuego del deseo arrasa con todo, inluso con el deseo.
1274 - Sobre la desidia
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¿Cuántas veces leí o dije que había que escribir todos los días y cuántas
veces preferí hacer otra cosa? El problema con el compromiso respecto a la
escrit...
Hace 7 años
3 comentarios:
genial!! me gusto muchisimo el 2, y el resto tambien...
a mi en cambio me gusto muchísimo el resto, y el dos también...
Sutilisimo sobre todo “tu cuello durante mi lengua”. Muy bueno Franco.
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