lunes, 9 de junio de 2008

Al parecer, en distintos sitios, se produjeron dos textos con un mismo final, dos personas distintas, o una sola con más giros de reloj a cuestas, encontraron dos caminos para acabar de igual manera. He aquí las variaciones:

a) Enemistado con el orden de las cosas en ese momento, empezó por mover una piedra del tamaño de su puño, y desde ese instante no cesó en su titánica empresa. Redirigió cauces de ríos, moldeó nubes, cacareó perfectamente e incluso maulló para los perros. Alteró todo, hasta la gente; que no notó cuando el mundo giraba al revés.

b) "Esto no va acá."
"Esto no va acá."
Decía antes de mover los objetos que parecían estar ubicados de manera imperfecta.
Años más tarde, el mundo giraba al revés.

Y todo culpa de que Mary escribió esto.

4 comentarios:

Anónimo dijo...

Después de todo, gira, ¿no? Malo que se detenga o que uno deje de visitar blogs. Volví (como si importara) y sólo pasaba para saludar.

Anónimo dijo...

mmmmm.creo que captaste bien algo que me da la sensacion de cuando sentimos
alejamiento, el mundo gira al revés de dia de por medio y hay algo que se aleja y es horrible no alcanzar a detenerlo..... creo que ya divagé...pero tenia que hacerlo.
talvez sepas a que me refiero.

saludo

María (Letras) dijo...

Me encanta cuando me toca hacer de culpable (H), y especialmente de cosas geniales. Es como si uno va caminando por la calle, y se tropieza, y dos personas vienen a ayudar y se ven y notan que se conocen desde hace años y siempre esperaron ese encuentro, y gualá son felices. Una satisfacción similar.
Un beso-kiss, en esta noche tan night que tengo que encerrarme porque la gripe se atrincheró en mi cuerpo y ella manda ahora.

pio dijo...

Otro texto más a favor de la tesis que dice que somos todos el mismo poeta.

 

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